La segunda venida de Cristo a la Tierra es un tema central en el cristianismo y por tanto es un tema que todas las denominaciones que profesan fe en Jesucristo abordan de una u otra manera.
Si bien, hay muchas posiciones disímiles entre las distintas corrientes del cristianismo, hay en la actualidad algunas posiciones que ameritan ser revisadas:
1.- ¿La segunda venida de Cristo será visible o invisible?
2.- ¿La segunda venida de Cristo es un evento pasado o futuro?
¿LA SEGUNDA VENIDA DE CRISTO SERÁ VISIBLE O INVISIBLE?
Si bien, según se desprende de la propia Biblia, la segunda venida de Cristo será visible a todo ojo humano tal como dice Apocalipsis 1:7 "He aquí que viene con las nubes y todo ojo le verá", hay sin embargo, una corriente dentro del cristianismo que asegura que la venida de Cristo se produjo de manera invisible y que el mundo no se ha percatado de este evento.
Sin embargo, cabe preguntar: ¿cómo es posible que un evento como la segunda venida de Cristo a la Tierra haya pasado desapercibido para el mundo entero y sólo haya sido percibido por unos pocos? Los defensores de la "presencia invisible de Cristo" dicen que esos pocos percibieron la segunda venida porque tienen el "ojo del discernimiento espiritual". Esto, huelga decir, es una interpretación muy rebuscada de las Santas Escrituras y que al decir de una gran mayoría de personas sensatas, no tiene cabida alguna en una interpretación sana de la Biblia.
La Biblia sin embargo, aborda la pregunta: ¿cómo vendrá Jesús en su segunda venida? La respuesta la entregaron unos ángeles a los apóstoles que vieron a Jesús ascender al cielo:
Vea el relato de esta conversación en el libro de los Hechos de los Apóstoles.
"Y habiendo dicho estas cosas, viéndolo ellos, fue alzado; y una nube le recibió y le quitó de sus ojos. Y estando con los ojos puestos en el cielo, entre tanto que él iba, he aquí dos varones se pusieron junto a ellos en vestidos blancos, los cuales también les dijeron: Varones Galileos, ¿qué estáis mirando al cielo? este mismo Jesús que ha sido tomado desde vosotros arriba en el cielo, así vendrá como le habéis visto ir al cielo." (Hechos 1:9-11)
Del análisis de Hechos 1:9-11 igualmente se confirma la manera en que Jesús volverá a la Tierra en su segundo advenimiento, noté estos detalles que expresa el propio relato bíblico:
- "así vendrá como le habéis visto ir al cielo" (v. 11)
Los ángeles aclararon que la segunda venida de Cristo a la Tierra será de la misma manera en que se fue de la Tierra. ¿Cómo fue esta manera?
- "Y habiendo dicho estas cosas, viéndolo ellos, fue alzado; y una nube le recibió y le quitó de sus ojos." (v. 9)
Cuando Jesús se despidió de los discípulos ellos lo vieron. Literalmente lo vieron. Una nube le recibió y le quitó de sus ojos desapareciendo frente a ellos gradualmente.
Igualmente, cuando Jesús venga en su segundo advenimiento los cristianos le verán descender del cielo en una nube y hacerse visible delante de todos los hombres.
- "Y estando con los ojos puestos en el cielo" (v. 10)
Cuando Jesús vuelva, los cristianos y toda persona estarán con los ojos puestos en el cielo, observando como Jesús desciende del cielo a la vista de los hombres.
Frente a la pregunta: ¿la segunda venida de Cristo será visible o invisible? La Biblia no deja lugar a dudas:
El Apocalipsis dice: "He aquí, que viene con las nubes y todo ojo le verá" (Apocalipsis 1:7) Aunque hay una corriente dentro del cristianismo que enseña que el segundo advenimiento sería percibido o "visto" sólo por cierto tipo de cristianos y no de manera literal sino a través del ojo del discernimiento y que las demás personas no se percatarán del evento, lo cierto es que la Biblia no enseña cosas rebuscadas y buscando torcer el significado de las cosas. La Biblia dice: "todo ojo le verá".
El Señor Jesús dijo: "Porque como el relámpago que sale del oriente y se muestra hasta el occidente, así será la también la venida del Hijo del hombre." (Mateo 24:27)
El mismo Jesús añade: "Y entonces se mostrará la señal del Hijo del hombre en el cielo, y entonces lamentarán todas las naciones de la tierra, y verán al Hijo del hombre que vendrá sobre las nubes del cielo , con grande poder y gloria. Y enviará a sus ángeles con gran voz de trompeta, y juntarán sus escogidos de los cuatro vientos, de un cabo del cielo hasta el otro." (Mateo 24:30-31)
La Biblia una y otra vez indica que el segundo advenimiento de Cristo no pasará desapercibido para la humanidad. "Todo ojo le verá". Nadie quedará ignorante el día en que Cristo venga. "Porque como el relámpago que sale del oriente y se muestra hasta el occidente, así será la también la venida del Hijo del hombre." (Mateo 24:27)
Cuando Jesús venga: "lamentarán todas las naciones de la tierra, y verán al Hijo del hombre que vendrá sobre las nubes del cielo, con grande poder y gloria." Estas palabras no permiten pensar en un evento del cual no se darán cuentas las personas cuando ocurra.
¿VENIDA O PRESENCIA?
Quienes abogan por la idea de que Jesús ya vino a la Tierra en su segundo advenimiento argumentan que hay que poner atención en la traducción correcta de la palabra griega que se traduce como "venida" y que en griego es παρουσία.
Hay que reconocer que la palabra παρουσία tiene dos acepciones, una la de "presencia" y otra que indica la idea de "llegada", "advenimiento" o "venida".
El Diccionario Griego - Español de J.M. Pabón indica lo siguiente en relación a παρουσία : "presencia, estado actual de una cosa, bienes, fortunas, recursos actuales, venida, llegada, segunda venida de Cristo (para el juicio final)".
Ahora bien, el Léxico Griego - Español del Nuevo Testamento de Alfred E. Tuggy de Editorial Mundo Hispano indica que la palabra παρουσία se utiliza 24 veces en el Nuevo Testamento y en sólo dos de ellas se traduce directamente como "presencia", esto es en 2 Corintios 10:10 y Filipenses 2:12. Mientras que en las restantes 22 veces se traduce como "venida" y en una al menos como "advenimiento", traduciéndose 16 veces como "venida" en relación al segundo advenimiento de Cristo (Mateo 24:3; Mateo 24:27; Mateo 24:37; Mateo 24:39; 1 Corintios 15:23; 1 Tesalonicenses 2:19; 1 Tesalonicenses 3:13; 1 Tesalonicenses 4:15; 1 Tesalonicenses 5:23; 2 Tesalonicenses 2:1; Santiago 5:7–8; 2 Pedro 1:16; 2 Pedro 3:4; 2 Pedro 3:12; 1 Juan 2:28).
Dos veces se utiliza el término griego en relación a Satanás y el anticristo (2 Tesalonicenses 2:8-9) y en que se traduce una vez como venida y otra como advenimiento.
Otras cuatro veces referido a otras personas: 1 Corintios 16:17, 2 Corintios 6:6-7 y Filipenses 1:26 y en todas se traduce como "venida".
De acuerdo a todo lo anterior, se desprende que de las dos acepciones para la palabra παρουσία la de presencia es la menos usada en el Nuevo Testamento, con sólo un 8% de las traducciones, mientras que la acepción de "venida" o "advenimiento" contempla el 92% del total de veces en que se usa el término griego y cuando es relacionada con Cristo, el 100% de las veces.
De las tres veces en que se sugiere la traducción de presencia para la palabra , se hace claro que en al menos 1 de ellas se traduce igualmente como "venida" en la versión antigua y moderna de la Biblia Reina - Valera, manteniéndose la traducción "presencia" en 2 Corintios 10:10 y en Filipenses 2:12.
Consultada una persona de habla griega sobre el significado real de la palabra παρουσία manifestó diciendo: "Es como si la reina de Inglaterra viniese a nuestro país. La gente estaría muy feliz, irían a verla y a saludarla con la mano." Eso concuerda más con la idea de llegada, arribamiento o venida que con la idea de un evento invisible a los ojos y del cual nadie se da cuenta.
Es claro que obviando ideas tendenciosas, la traducción "venida" o "advenimiento" para la palabra griega παρουσία resulta ser la traducción más adecuada en opinión de la mayoría de los autores expertos en la lengua griega y es por tanto, la acepción que se acepta como indicada y teniendo además en cuenta el contexto en que cada una de ellas es utilizada en el Nuevo Testamento.
Como es bien conocido, una de las traducciones más famosas de la Biblia es la Vulgata Latina, una obra producida por el gran erudito del Siglo IV Jerónimo, quien comenzó su trabajo con una traducción de los cuatro evangelios, que publicó en 383 d.C. Es interesante notar que Jerónimo, en 20 de las 24 ocasiones en las que la palabra παρουσία aparece en el Nuevo Testamento, escogió la palabra latina para “venida”, adventus de la cual se deriva la palabra española “advenimiento”. Las cuatro excepciones son 1 Corintios 16:17; 2 Corintios 10:10, Filipenses 2:12 y 2 Pedro 1:16. En estos lugares la Vulgata usa praesentia, la palabra latina para “presencia”. Merece notarse que sólo el último de estos cuatro versículos trata de la parousía de Cristo. En las dieciséis apariciones restantes, donde παρουσία se refiere a la venida de Cristo, Jerónimo prefirió la palabra latina adventus.
Sobre el significado bíblico de la palabra παρουσία consulte el siguiente apartado:
Ahora bien, quienes defienden la idea de una "presencia invisible", argumentan que dicha presencia sería acompañada por eventos como guerras, enfermedades y muerte, indicando que dichos eventos serían la confirmación de la presencia invisible de Cristo en la Tierra. Sin embargo, una vez más nos encontramos con una interpretación equivocada de las Escrituras, porque refiriéndose a esos eventos de guerras, enfermedades y muerte Jesús dijo que eran señales no de una presencia invisible de Cristo, sino de que su venida está cerca. Aludiendo a esas señales, Jesús dijo: "De la higuera aprended la parábola: Cuando ya su rama se enternece, y las hojas brotan, sabéis que el verano está cerca. Así también vosotros, cuando vieréis todas estas cosas, sabed que está cercano, a las puertas." (Mateo 24:32-33)
Las señales de guerras, enfermedades y muertes no son un indicador de la presencia invisible de Cristo, sino de que el "está cercano, a las puertas" y que la venida de Cristo, el Sol de Justicia indica que "el verano está cerca".
¿LA VENIDA DE CRISTO, EVENTO PASADO O FUTURO?
Quienes abogan por la idea de una "presencia invisible de Cristo en la Tierra", un concepto bastante ambiguo y poco claro, indican que dicha presencia comenzó a inicios del Siglo XX, siendo por tanto un evento que debemos buscar en el pasado y hace ya más de un siglo atrás en el tiempo, mientras que la mayoría de los cristianos piensan que la segunda venida de Cristo se encuentra en el futuro y es un evento que aún se espera.
La fecha que se propone como inicio de la presencia invisible de Cristo en la Tierra coincide con el inicio de la Primera Guerra Mundial en 1914 y es sostenida en base a la interpretación errónea de una profecía dada a Daniel sobre el Rey Nabucodonosor II (630 - 562 A.C.). Vea esto en Daniel 4:1-37.
¿Por qué se puede decir que la interpretación que nos lleva a 1914 es errónea? Por varias razones.
1.- La profecía registrada en Daniel no aplica a la historia del mundo y menos a los eventos ocurridos a inicios del Siglo XX. Puesto que la Biblia es su propio interprete, debemos aceptar lo que la Biblia dice sobre esta profecía y que en dos ocasiones establece sin lugar a dudas que:
a) "Todo aquesto vino sobre el rey Nabucodonosor" (Daniel 4:28) y,
b) "Se cumplió la palabra sobre Nabucodonosor" (Daniel 4:33)
Mientras que quienes abogan por la idea de la presencia de Cristo en la Tierra enseñan que el árbol que vio Nabucodonosor en visión representa la gobernación suprema de Dios, particularmente en lo que se relaciona con la historia humana en la Tierra, la interpretación entregada por el propio profeta Daniel dice claramente en cuanto al árbol que el rey pagano vio en visión: "Tú mismo eres, oh rey, que creciste, y te hiciste fuerte, pues creció tu grandeza, y ha llegado hasta el cielo, y tu señorío hasta el cabo de la tierra." (Daniel 4:20-22)
Nuevamente y de manera equivocada se indica que los "siete tiempos" de la profecía de Daniel 4 sobre el rey Nabucodonosor corresponden a los "tiempos de los Gentiles" mencionados por Jesús en Lucas 21:24 y cuya aplicación no encuentra soporte bíblico alguno y menosprecia la verdadera aplicación de los tiempos de los gentiles y en que la Jerusalén simbólica sería pisoteada por las naciones según Apocalipsis 11:1-3 y que habla de un tiempo profético y que no son los "siete tiempos" de Daniel 4, que ya vimos aplican sólo sobre el rey Nabucodonosor, sino que habla de los "42 meses" proféticos o "1260 días" proféticos que equivalen a años de Daniel 7:25 y que son referidos como "tiempo, tiempos y la mitad de un tiempo" es decir, 1260 años de historia de la humanidad y que además coincide con el tiempo que la bestia de Apocalipsis 13 regiría despóticamente sobre la Tierra por medio de la acción de una de sus cabezas gobernantes (Vea Apocalipsis 13:1-8).
Los errores continuan, y quienes abogan por la presencia invisible de Cristo en la Tierra asignan un inicio a "los siete tiempos" de Daniel 4 que son traducidos a 2520 años sin tener autorización bíblica para hacer tal cosa insistiendo en que corresponden a la historia de la humanidad y no sólo al rey Nabucodonosor y entonces se fija el tiempo de inicio en el año 607 a.C., lo cual por simple operación de resta nos llevaría a 1914. (Restar 607 - 2520= 1913 + el año 0=1914).
¿Qué pasó según estos intérpretes en el año 607 a.C.? Se dice equivocadamente que el reino de Juda fue destruido por Nabucodonosor II y fue depuesto el último rey de Judá llamado Sedequías y fue tomada la ciudad de Jerusalén.
En esta interpretación hay a su vez varios errores. Primero Nabucodonosor II, hijo de Nabopolasar no destruyó Jerusalén en el año 607 a.C porque de hecho, el recién comenzó a reinar como corregente de su padre en el año 606 a.c. Luego, a la muerte de su padre, comenzó su verdadero gobierno en el año 605 a.C. De todas maneras, no estaba gobernando en 607 a.C.
Luego, la invasión de Jerusalén fue en el décimo año del reinado de Sedequías que comenzó en 597 a.C. y esto nos lleva al año 587 a.C. como fecha en que fue destruida Jerusalén y despuesto el rey Sedequías a manos de Nabucodonosor, de manera que la fecha propuesta como inicio de los "siete tiempos" de Daniel 4 no coincide porque se basa además en errores históricos que no son menores.
Con relación a la fecha de 607 a.C. dada por los simpatizantes de la WatchTower, se registra las siguientes palabras de un ex dirigente de alto nivel de esa misma organización, quien dijo:
"Una enseñanza importante de los Testigos de Jehová es que la Biblia señala al año 1914 como el fin del “tiempo de los gentiles” de Lucas 21: 24, y que en ese año Jesucristo tomó el poder de su Reino y comenzó a gobernar de manera invisible a los ojos humanos. Las referencias a un periodo de “siete tiempos” en el capítulo cuatro de Daniel constituyen la base de partida para efectuar los cálculos que conducen a esa fecha. Haciendo uso de otros textos, esos “siete tiempos” se convierten en un periodo de 2.520 años que se cuentan a partir del año 607 antes de Cristo y concluyen en 1914 después de Cristo. Se fija la fecha de comienzo, 607 antes de Cristo, como el año en que Jerusalén fue destruida a manos del conquistador babilonio Nabucodonosor. Yo sabía que el año 607 antes de Cristo era una fecha especial en nuestras publicaciones, pero no sabía realmente por qué."
"Se dedicaron meses de investigación sólo para este tema de “Cronología” que resultó ser el más extenso en el libro Ayuda. Gran parte de ese tiempo se dedicó a hacer indagaciones para encontrar alguna prueba, algún hecho histórico que apoyara la fecha de 607 antes de Cristo como algo fundamental para nuestros cálculos con respecto a 1914."
"No encontramos absolutamente nada que sustentara la fecha del 607 antes de Cristo. Todos los historiadores señalaban a una fecha veinte años posterior a esa. Antes de preparar la información sobre “arqueología” en el libro Ayuda no tenía conocimiento de la existencia de decenas de miles de tablillas cuneiformes de barro cocido correspondientes al período de la Babilonia Antigua encontradas en Mesopotamia. En ninguna de ellas había indicación alguna de que el período del Imperio Neobabilónico (en el que tuvo lugar el reinado de Nabucodonosor) abarcara el tiempo suficiente para que encajara con nuestra fecha, 607 antes de Cristo, para la destrucción de Jerusalén. Todo señalaba a un período de tiempo veinte años más corto de lo que se afirmaba en la cronología de nuestras publicaciones." (Raymond Franz, ex miembro del Cuerpo Gobernante de la Sociedad WatchTower. Libro Crisis de Conciencia, pág. 27-28)
Todo lo anterior, y que constituye un antecedente fundamental dentro de la posición que procura llevarnos a creer que el Reinado del Mesías comenzó invisible con su venida en 1914, y que en consecuencia ya tiene una data de más de 100 años, no sólo resulta ser un error de interpretación que la sola razón indica que está rotundamente equivocado, sino que además es refrendado por las propias palabras de un ex miembro de la más alta jerarquía dentro de dicha corriente religiosa y que reconoce estar basada en un reconocido error histórico.
Más allá de estos errores inconvenientes en la interpretación de la Biblia, la segunda venida de Cristo es la nota tónica de las Sagradas Escrituras y anima a cada cristiano a esperar el regreso de Jesús con fe y esperanza de que algún día podremos ver un mundo mejor. Como dijo una vez el apóstol Juan: "Ven pronto Señor Jesús. Así sea."
Sobre el gobierno e historia de Nabucodonosor II vea la siguiente dirección:
https://es.wikipedia.org/wiki/Nabucodonosor_II
Sobre la caída de Jerusalén y la deposición de Sedequías del trono, vea en la siguiente dirección:
https://es.wikipedia.org/wiki/Sedec%C3%ADas_de_Jud%C3%A1
CONCLUSIONES
Hasta aquí y sólo analizando las dos posiciones más recurrentes sobre la segunda venida de Cristo, tenemos que aquella que insiste en que Jesús ha estado reinando sobre la Tierra por más de un siglo no encuentra fundamento alguno, no sólo porque no se ajusta a una interpretación estrictamente basada en la Biblia sino porque además está fundada sobre errores históricos garrafales y que no permiten aceptarla como válida y menos como la verdad.
Lo que nos enseña la Biblia de manera muy clara es que cuando Jesús venga en su segundo advenimiento, su venida será real y todo ojo le verá.